El diseño de interiores en equipamientos turísticos y espacios comerciales cuenta hoy en día con un amplio catálogo de opciones con vistas a marcar la diferencia y generar experiencias únicas. Aparecen así alternativas como las fuentes de agua interiores, cuya función va más allá de un mero elemento decorativo, ya que contribuye a crear ambientes singulares y atractivos que atraen clientes.
La experiencia del cliente asociada al diseño de interiores debe ser abordada desde el principio. En concreto, es durante la fase de diseño cuando es posible estudiar qué tipo de equipamientos y soluciones se van a instalar, cuál será su disposición y su finalidad.
Desde hace años, las fuentes de agua interiores se conciben como una solución ideal para decorar espacios comunes en hoteles y centros comerciales.
Así, una fuente ornamental puede convertirse en un elemento clave para este tipo de establecimientos, generando una respuesta positiva en el público, ya que crean una atmósfera que invita a los usuarios al relax y a la distensión.
1. Fuentes de vaso
Las fuentes más clásicas, se distinguen por su contribución a la armonía del ambiente, su belleza y su valor arquitectónico. A través de este tipo de fuentes de agua interior es posible evocar atmósferas frescas y tranquilas. Además, es posible sorprender con la incorporación de múltiples chorros de agua y luces, creando espectáculos que asombran y entretienen.
2. Cortinas digitales
Soluciones más llamativas, se trata de un elemento típico en el diseño de interiores de vestíbulos para hoteles Business & Conference y centros comerciales. Funcionan así como carta de presentación, potenciando una primera impresión positiva.
Como innovación, las cortinas digitales de agua permiten incluir mensajes e imágenes en el agua. Es común, por ejemplo, su uso para anunciar eventos corporativos o promocionar marcas comerciales, generando un elemento de comunicación atractivo y efectivo.
3. Espejos de agua
Fuentes de agua interior formadas por una fina capa de agua que actúa de forma similar a un espejo y que potencian un ambiente relajado y sofisticado. Se trata de un elemento que, instalado en jardines, halls o pasillos de centros comerciales u hoteles, genera atmósferas en las que parece que el tiempo se detiene.
4. Cascada
Las cascadas de agua funcionan como elemento decorativo en grandes espacios en hoteles y centros comerciales, funcionando como una caída vertical de agua que simula las cascadas naturales.El movimiento continuo de agua y el sonido asociado a esta corriente potencia el encanto de cualquier espacio y atrae al público hacia él, en busca de serenidad y belleza.
Los principales beneficios que aportan este tipo de fuentes a los espacios comunes de hoteles y centros comerciales incluyen:
- Propiedades decorativas que definen el estilo del establecimiento y lo diferencian de su competencia. Mediante juegos de agua, luz y color en este tipo de instalaciones acuáticas, se busca sorprender al usuario y generar una experiencia única.
- Más allá de la estética, la instalación de fuentes de agua interiores potencian a su vez emociones, alineándose con una experiencia de usuario positiva. Ante ambientes secos, pueden fomentar un plus de frescura y actuar incluso como humidificador.
- Aportan sensación de amplitud, sobre todo las fuentes de agua interior diseñadas como espejos de agua.
- Pueden colocarse en interiores o jardinesGeneran branding. Por ejemplo, la decoración mediante cortinas digitales alinea a una marca con valores como innovación y originalidad, ya que permiten la proyección de logos y mensajes personalizados. Además, este tipo de instalación permite la monetización, ya que es posible proyectar mensajes publicitarios en una plataforma extraordinaria para atraer la atención de los usuarios.Las fuentes de agua instaladas en centros comerciales incentivan el flujo de personas, beneficiando a los negocios circundantes.
- Mantenimiento sencillo
De este modo, la instalación de fuentes de agua interior potencian la diferenciación de un espacio en instalaciones de ocio como hoteles y centros comerciales. Promueven así una imagen única que, además, queda alineada con experiencias de usuario positivas, memorables y que fidelizan.