Las piscinas con toboganes son un punto imprescindible para las instalaciones acuáticas dirigidas a un público infantil, ya que abren un mundo de nuevas experiencias y diversión para los más pequeños. Equipadas con toboganes de agua de diversos tamaños y configuraciones, hoy en día existen muchas opciones para crear instalaciones únicas y memorables para los usuarios.
¿Por qué instalar piscinas con toboganes?
Las caras de adolescentes y niños se iluminan cuando observan piscinas con toboganes: saben que quedan por delante horas o días de diversión asegurada.
Las piscinas con toboganes se convierten así en un valor añadido para cualquier instalación dedicada al ocio infantil y juvenil. Con un parque de piscinas superior a 1,3 millones de unidades (entre las de uso residencial y colectivas), España es el cuarto país del mundo y el segundo de Europa en número de piscinas según ASOFAP.
En un mercado tan competitivo, y donde no faltan ofertas de ocio y turismo, las piscinas con toboganes suponen un factor diferencial que crea en el público familiar una potente imagen de marca y percepción positiva de la instalación.
Conscientes de ello, hoteles y resorts con piscinas multipropósito optan por instalar piscinas con toboganes, generando sus propios parques acuáticos adecuados a sus necesidades, ya sea en interior o exterior.
Piscinas con toboganes: recomendaciones de diseño
Hoy en día, las piscinas con toboganes ofrecen múltiples opciones: desde un acabado orgánico y armónico, hasta una estética colorida y alegre.
En cualquier caso, a nivel geométrico, se recomienda el uso de formas suaves e irregulares, que potencien la diversión también a nivel visual, pero evitando problemas de fricción o seguridad.
Las posibilidades para el acabado en superficie, por otro lado, incluyen baldosas cerámicas, de vidrio o recubrimiento de PVC, mientras que el sistema de construcción más recomendado para la construcción de formas irregulares es el hormigón.
Además, al tratarse de una instalación para un público infantil y juvenil, la seguridad al instalar este elemento es esencial. En este punto, se recomienda una temperatura media para piscinas en interior y exterior sin calefacción de entre 30 y 32 ℃, y una profundidad de entre 1.2 y 1.6 metros.
Respecto a las características técnicas, el tiempo de recirculación variará dependiendo de las regulaciones de cada país. A título de ejemplo, según los estándares de la Normativa Británica, el tiempo de recirculación recomendado es de 2 horas para piscinas comprendidas entre 1,2 y 1,6 m de profundidad,
Por otro lado, el tratamiento de agua recomendado puede consistir en dosificación de hipoclorito, pero una buena alternativa podría ser un clorador salinol ya que permite reducir los costos de mantenimiento.
En cuanto a la recirculación del agua, el sistema de desbordamiento alrededor de todo el borde de la piscina es el método más eficiente.
Finalmente, respecto a las regulaciones será importante comprobar las actualmente vigentes y adecuar el diseño de cada proyecto a los requisitos normativos de cada país.
En definitiva, las piscinas con toboganes suponen una instalación ideal para el ocio juvenil e infantil que, siguiendo las posibilidades de diseño actuales, se convierten en un reclamo excelente para el público familiar.